La mayoría de los deportes sean individuales o por equipos están expuestos a traumatismos que puede ser de mínima intensidad hasta lesiones graves e incluso la muerte, muchas veces no se sabe actuar en el momento del mismo y puede agravar el cuadro evolutivo de la lesión, las heridas son muy frecuentes y solo se les presta atención cuando hay una hemorragia grande. Saber como hacer un manejo inicial debería ser de conocimiento de toda persona.
Toda actividad física que se realice tiene el riesgo de presentar un trauma que genere una lesión en la integridad de nuestro cuerpo y cuando practicamos un deporte el riesgo que existe es latente.
Sea por que estamos iniciando una práctica hasta que tenemos la experticia necesaria a la misma con la práctica continua.
Entendamos que un trauma es todo evento que genere una agresión sobre nuestro cuerpo la cual según su intensidad puede ser leve, moderada, intensa y esto determinaría la gravedad de la lesión y por ende el tratamiento a seguir.
Los traumatismos pueden ser abiertos o cerrados.
Abiertos es cuando la lesión produce rotura de la piel en la cual puede observarse un sangrado siendo este también escaso, leve, moderado o intenso donde ya hay una hemorragia.
Cerrado: es aquel donde no se evidencia un ruptura de la piel pero las lesiones pueden ser internas, y son aún más graves por que el sagrado no se observa y con el paso de los minutos u horas da síntomas que hay una lesión que puede dar síntomas y signos de la lesión interna.
Las heridas se van a clasificar dependiendo del tipo de sangrado, del objeto que la produce en la siguiente forma:
Una herida abierta: se lesiona la piel y puede ser superficial o profunda, si lesiona tejidos subcutáneos, músculos, huesos.
Cerrada: no hay ruptura de la piel pero si lesiones debajo de esta como los músculos, tendones, huesos, vísceras, etc.
Según el objeto que la produce:
– Cortante: producida por un objeto con filo como un cuchillo, los bordes de la herida son regulares, puede presentar un sangrado venoso y/o arterial.
– Corto-punzante: producida por un objeto con punta y filo, por lo que además de tener longitud en extensión sobre la piel hay una gran profundidad.
– Contundente: producida por un objeto macizo, se caracteriza por que puede no romper la piel formar un abultamiento que se conoce como hematoma que es un sangrado interno que se limita al sitio del golpe, se observa de un color morado o violáceo. También puede romper la piel y se observan bordes irregulares, y que brotan hacia el exterior puede haber o no sangrado.
– Corto- contundente genera los dos tipos de lesiones mencionadas anteriormente el hematoma y el sangrado por ruptura de la piel.
– Escoriante: son las abrasiones o “ raspaduras” de la piel que se generan por fricción contra una superficie áspera, esta genera salida de un sangrado escaso que se conoce como capilar y que forma la costra, concha o escara.
L El sangrado determina el tipo de lesión vascular que se produce:
– Venoso: es la lesión de una vena, el color es un rojo oscuro y su salida es en forma de chorro lento, pero dependiendo del tamaño del vaso el volumen puede ser abundante.
– Arterial: La lesión se produce en una arteria, la sangre es de un color rojo vivo y se expulsa en forma intermitente, ya que está mediada por los latidos del corazón.
– Capilar: es la más superficial y no hay hemorragia como tal ya que la lesión es donde están los capilares o malla de vasos donde se unen las arterias y venas que son minúsculas, aparece un liquido seroso o suero que es el sanguíneo.
Otro tipo de lesión es la quemadura la cual es generada por una fuente de calor intensa que produce lesión de la piel, es importante saber que la variación de temperatura puede ser tanto en calor como en frio,
Según el área de superficie de cuerpo que se quemé y la profundidad que afecte en la piel y tejidos debajo de ella se clasificarán en varios grados:
Primer grado: afecta piel y tejido celular subcutáneo es la típica quemadura de sol, no deja cicatrices.
Segundo grado: afecta hasta la dermis: puede dejar o no cicatrices
Tercer grado: afecta hipo dermis y órganos internos como músculos y huesos, son quemaduras graves donde hay alta posibilidad de perder una extremidad, un órgano o la vida.
Las quemaduras pueden ser producidas por hidrocarburos, químicos, caústicos, sales, electricidad, fuego, nitrógeno líquido (frio).
Todo trauma debe brindársele la debida atención ya que por insignificante que sea este puede agravarse y generar una complicación.
Ante una
herida hay que detener el sangrado por lo que una medida inicial es hacer presión
directa sobre la herida en lo posible con una gasa estéril, un trapo limpio,
recordemos que los accidentes ocurren en lugares donde incluso no hay un
botiquín de primeros auxilios, pero la presión es lo más importante detener el
sangrado, esta debe ser fuerte y continua, si el sangrado no cede se colocaran
más gasas encima de la que se está haciendo presión sin retirar.
En las
heridas pequeñas se debe lavar con abundante agua limpia y jabón quirúrgico,
hacer presión y determinar si amerita sutura (puntos) o no, labor que realiza
el cuerpo médico.
Un hematoma
se le realiza presión y se aplica hielo haciendo suave masaje.
Todo
traumatismos cerrado es decir que no presente heridas en abdomen o tórax que sea
de moderado a intenso que genere dolor e incapacidad de movimiento debe ser valorada
por personal médico para descartar lesiones de estructuras óseas o de órganos y
vísceras.
Los deportistas en actividades de contacto progresivamente que van practicando su cuerpo se va acondicionando a los traumatismos que reciben durante la activad generando una resistencia a los impactos, sin embargo ciertos movimientos o un impacto muy fuerte es cuando se genera la lesión.r.
Siempre
prestemos atención a un traumatismo por leve que sea y brindemos la debida
atención, y como recomendación tengamos
un botiquín de primeros auxilios en nuestro equipo deportivo.
Es mejor
tenerlo y no usarlo, que no tenerlo y necesitarlo.
Los traumatismos
contusos, ceden rápidamente a la acción de medicamentos homeopáticos como el
Arnica, la ruta graveolens, la caléndula, ya que regulan la inflamación en una
forma natural y generando un proceso de recuperación rápido.
El agua fría,
el hielo y el reposo son las claves fundamentales para los tratamientos
iniciales de traumas que no presentan heridas.
